Había visto aquella cúpula tantas veces en fotografías, en diapositivas o en televisión... La había estudiado en clase de Historia del Arte, había tenido que hablar de cómo se construyó y de Brunelleschi, quien la ideó. Pero a pesar de todo esto, cuando la tuve delante de mis ojos, a unos metros de mí, me quedé boquiabierto. La cúpula de la Catedral de Florencia es enorme, impactante, majestuosa... Podría seguir escribiendo adjetivos que la realzaran, pero no conseguiría transmitir plenamente su grandiosidad.
Cuando llegué a Florencia, estaba ansioso por visitar la Catedral de Santa María del Fiore y el campanile de Giotto, así que tras dejar las mochila en el albergue donde me alojé, me puse a deambular por las callejuelas del centro histórico. Aún iba un tanto dormido, un poco perdido y despistado, sin mapa, a la aventura, pero esa sensación me gustaba (y me gusta). No saber qué me voy a encontrar, con que sorpresa me voy a topar, es algo que me hace continuar vagando sin rumbo en mis viajes. Iba caminando sumido en mis pensamientos, recordando aquellas clases de arte e historia de Bachillerato.
Me encontraba en Florencia, la cuna del Renacimiento. Por mi cabeza pasaban las diapositivas de aquellas clases en el instituto: el David de Miguel Ángel, la Piazza della Signoria, las puertas del Baptisterio de Ghiberti... Tan envuelto en recuerdos iba que lo que vi al final de aquella calle estrecha pensaba que se trataba de uno más, pero de repente me di cuenta de que me equivocaba, aquello era real. En las diapositivas aquella cúpula no se veía tan grande. Y en ese momento, fui consciente de que por fin, estaba viendo realmente la cúpula de la Catedral de Florencia de Brunelleschi y, como ya comenté, boquiabierto me quedé.
La construcción de la cúpula de la Catedral de Florencia
Brunelleschi resultó ser el ganador en 1418 del concurso organizado para construir la cúpula del Duomo de Florencia, construido por el Arnolfo di Cambio. La dificultad principal se centraba en la necesidad de cubrir un amplio espacio con una enorme cúpula con el consecuente empuje colosal, muy difícil de contrarrestar. Brunelleschi propone la construcción de la cúpula sin la ayuda de cimbras (armazones de madera de forma curva que sirven de soporte a una bóveda o arco mientras se construye) ni andamios que partieran del suelo.
Así pues, Brunelleschi concibió una cúpula octogonal de autosustentación, teniendo en cuenta el modelo de las grandes obras romanas, como el Panteón, que tanto había estudiado. Además, construiría la cúpula con diversos materiales: piedra en la parte de abajo, donde la curvatura es mínima (así se ganaría más resistencia) y ladrillos arriba (lo que aligeraría el peso). Pero ahí no quedaba todo. Asimismo, pensó en una cúpula doble, formada por dos casquetes superpuestos. De esta forma, el orientado al interior sería de un espesor de más de 2 metros, mientras que el exterior sólo sería de unos 80 centímetros.
El resultado de 16 años de obras fue la cúpula de albañilería más grande del mundo. Su peso es de 37 toneladas métricas y en su construcción se usaron más de cuatro millones de ladrillos. Mide 114 metros de alto con 41 metros de diámetro.
El interior, de 3600 metros cuadrados, fue decorado con unos frescos de Giorgio Vasari y Federico Zuccari que tienen al Juicio Universal como tema central.
Horarios de visita de la cúpula de la Catedral de Florencia
Lunes, martes, miércoles y viernes: de 10:00 a 17:00 horas.Jueves: de 10:00 a 15:30 horas (depende del mes).
Sábados de 10:00 a 16:45 horas.
Domingos y festivos: de 13:30 a 16:45 horas.
Precios para visitar la cúpula de la Catedral de Florencia
Si bien la entrada al Duomo de Florencia es gratuita, para subir a la cúpula es necesario pagar 8 euros.
4 comentarios:
Allá por el año 2000 me quedé con la boca abierta cuando el autobús que nos llevaba desde la estación de tren -a la que llegábamos desde Pisa y casi no nos había dado tiempo a cerrar la boca- hasta el albergue, pasó por delante del Duomo. Era casi de noche, pero la sensación se quedó ahí toda la noche hasta que, a la mañana siguiente, fuimos a visitarla y, cómo no, subimos a la cúpula y al campanile!
Es que es una cúpula muuuuy grande, jeje, seguro que no hemos sido los únicos que nos quedamos boquiabiertos al verla!
Me uno, a mi tb me impresionó mucho esta catedral, subí a la torre y perdí la cuenta de cuántos escalones había...tenía Florencia a mis pies!!! desde allí, una vista privilegiada de la gran obra de Brunelleschi, su cúpula!
He de decir tb que cuando entré a la Catedral me decepcionó un poquito...demasiado austera?
Hola Lacky, las vistas son increíbles. Quizá el interior no es tan impresionante como el exterior ni como el de otras iglesias italianas, de ahí tu decepción posiblemente.
Gracias por el comentario!
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