Llegué a la plaza sobre el mediodía, con la cámara de fotos, boli y libreta en mano, con la intención de entrevistar a algunos de los turistas que estuvieran por allí y recoger sus impresiones. El lugar estaba abarrotado. Los acontecimientos del día anterior hicieron avivar el ánimo de los concentrados y aumentó el número de personas en relación con los días precedentes.
Las preguntas que tenía en mente se centraban sobre todo en saber cuáles eran sus sensaciones. En primer lugar, quería saber si sabían qué estaba pasando en la plaza, por qué estaba la gente allí acampada, si habían oído hablar del movimiento 15M. Tras preguntar esto, me centraría en sus impresiones acerca de lo que estaban viendo allí desde el punto de vista de un turista. ¿Qué sentimiento les despertaba toda la gente allí reunida? También tenía preparada una pregunta que no sabía si iba a poder hacerla, pues dependía de encontrar a alguien que hubiera presenciado directamente los acontecimientos violentos del día anterior. Esa pregunta estaba relacionada con los sentimientos que hubieran experimentado en aquellos momentos. Si pasaron miedo, si lo veían "normal", si les era algo indiferente... Finalmente, encontré a un chico francés que pudo responder a todo esto. Después, quería saber si para ellos lo que ocurría era algo extraordinario, algo raro, que no hubieran visto en otros países que hubiesen visitado, o en sus propios países de origen. Para finalizar, la gran pregunta del millón: ¿se veía dañada la imagen de Barcelona o de España en general por este tipo de actos?
En primer lugar entrevisté a 3 chicas francesas de la región de Bretaña. Estaban sentadas cerca del monumento a Francesc Macià de Plaça de Catalunya. Tras explicarles mis intenciones, accedieron sin ningún problema a responder a mis preguntas.
Estas chicas habían visto imágenes por la televisión francesa de lo que estaba pasando en algunas ciudades españolas. Llegaron la noche anterior, por lo que no tenían idea del desalojo y de las escenas violentas que acontecieron ese día. Lo que ellas sabían era que estaban mostrando su descontento por el paro, por las pocas oportunidades de trabajo y por las elecciones, nada más. Intuían que debía de ser algo similar a lo que estaba pasando en Grecia, pero menos importante. Les sorprendió ver tanta gente en la plaza, tan organizada, tan variopinta. Eso fue lo que más les sorprendió, el gran número de personas que allí se congregaba. Por lo demás, tenían una sensación de normalidad, nada de miedo, ninguna mala impresión... Se sentían en realidad "al margen de aquella manifestación". "En Francia estamos acostumbrados a esto, los jóvenes se manifiestan con mucha frecuencia. Allí también pasan cosas similares, pero eso sí, lo más probable es que las autoridades no les hubieran dejado acampar durante tanto tiempo. Además, casi seguro que habría habido alborotadores violentos que hubieran empezado a romper cosas y a empeorar las cosas, por lo que la policía se habría visto obligada a intervenir". Estas chicas en su último viaje a Londres presenciaron también las manifestaciones de los estudiantes británicos en contra de los cambios en las universidades del Reino Unido, por lo que todo esto les resultaba normal y estaban preparadas para encontrarse situaciones parecidas en sus próximos viajes, ya que "Europa va cuesta abajo y el descontento de todos va cada vez en aumento". Después de todo esto concluyen diciendo que la imagen de Barcelona y la de España no se ve en absoluto dañada, que lo ven como algo normal y que "probablemente lo que hoy está pasando aquí, mañana podría pasar allí".
Son tan sólo tres opiniones, pero las tres van en la misma línea, muy diferente a la que en un principio podríamos tener. No sienten miedo ni inseguridad y no creen que la imagen de la ciudad se vea perjudicada. Pero repito, no son más que tres opiniones... Seguro que hay otras muy diferentes a estas. ¿Conocéis la opinión de otros turistas respecto a esta situación? ¿Cómo les afecta todo esto en su viaje? Como siempre, vuestros comentarios son más que bienvenidos.
El autor
José Luis es un andaluz afincado en Barcelona desde hace ya un tiempo. Su pasión es descubrir nuevas culturas, viajar y escribir. Por ello realizó estudios de traducción e interpretación, una forma bastante acertada de aunar estas tres aficiones. Se define como una persona inquieta y curiosa, adicto a los viajes y al chocolate y amante del deporte, sobre todo el tenis. Prefiere los lugares tranquilos y solitarios y los rincones por descubrir.

4 comentarios:
Me ha encantado el post. ¡Buen trabajo de investigación! ;)
Realmente interesante, la iniciativa ha sido muy buena. Saludos!
Gracias María y Patricia. A ver si podemos recoger más información acerca de lo que piensan los turistas...
Enhorabuena por enfocar todo este tema desde otro punto de vista, no menos interesante.
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